Member-only story
Alondra entendió que no tiene que terminar sus quehaceres en un solo día.
Que la vida va pasando y absolutamente nada la detiene.
Que todo se puede acabar en un abrir y cerrar de ojos.
Entendió que lo material nunca ha sido importante.
Lo más importante es el tiempo que nos queda por delante.
Alondra sabe que si no está en el trabajo… la sustituyen.
Pero su salud emocional es irremplazable.
Entendió que no debe tener prisa al dar una caminata y ver el paisaje.
Que no le gustan los apuros en su vida.
Alondra entendió que la comida puede llenar el vacío del estómago… pero no el del alma.
Que tiene derecho a disfrutar cada segundo lo que tiene.
Que el dinero puede comprar viajes… pero no tiempo.
Que cuando necesita espacio… lo tiene que tomar.
Que cuando quiere gritar… debe gritar.
Que es bueno quedarse un momento más acostada en la cama.
Que cuando quiere bailar… baila.
Y cuando quiero llorar… llora.
Alondra aprendió a escucharse detenidamente… y a darle prioridad a sus necesidades.
Desde que lo hace, su café no huele más a prisa…
Soy Alex Pacheco escritor, empresario y fundador de Epicbook. Me dedico a escribir los libros de figuras públicas y a contar historias.