¿Cómo Rebeca dejó de idealizar a la “mujer perfecta” que debía ser?

La noche en la que se enteró que le engañaron fue sin duda una de las peores de su vida.

A veces, las personas tienen una imagen de lo que está sucediendo a sus espaldas, sin embargo, ella no tenía ni idea de lo que estaba pasando. Rebeca pensó que cuando su novio no respondía a sus mensajes de texto, era porque estaba ocupado en una reunión. Cuando no estaban juntos, pensaba que él estaba ocupado trabajando duro.

Ella era guapa y bastante segura de sí misma. Además tenía plena confianza en él. Lo que menos pasaba por su mente era lo que sucedió.

Mirando hacia atrás, había muchas señales que deberían haberle mostrado quién era él en realidad. Pero en ese entonces, Rebeca no tenía ni idea. Descubrió que le era infiel de manera casual, un viernes por la noche.

- ¡Un mensaje de texto!, ¿En verdad?, ¡Qué infantil!, le comentó su mejor amiga, cuando ella lloraba desesperada en el teléfono.

Al terminar la llamada Rebeca se acostó en su cama y lloró en silencio. Si bien sabía que su amiga tenía toda la razón, que él era un idiota, inmaduro que no valía la pena; ella no podía dejar de llorar.

En su corazón solo cabían las lágrimas y la gran desilusión que sentía. Y es que nunca lo vio venir, nunca lo creyó…