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Ella se reconoció mala
Mala, le dijo sólo porque un día dejó de ser esa tonta que él buscaba cuando se aburría.
Mala, le dijo porque un día dejó de suplicarle por un poco de su tiempo, ese que según no tenía para ella, pero que si perdía con otra.
Mala, le dijo porque un día dejó de escribirle o llamarle o llorarle.
Mala, le dijo, sólo porque un día se atrevió a sonreír y le dolió porque sabía que esa alegría ya no era por él.
Y si, en efecto, ella se reconoció mala, porque lo fue, pero con su corazón.
Mala, sí, fue mala pero consigo misma, era ella que no se quería ni se daba el trato que intentaba alguien más le diera.
Mala, sí, un tiempo lo fue, porque recibió sobras, y no manjares.
Sí, ella se reconoció mala, y estuvo orgullosa de eso, y de reconocer que ya no le Importaba lo que dijeran, hablaran o pensaran de ella.
Si ser mala significa no volver a dejar que la pisoteen, a mucha honra, lo será hasta que muera.
Alex Pacheco.
Soy Alex escritor, emprendedor y fundador de Epicbook. Me dedico a escribir los libros de algunas figuras públicas y a contar historias épicas.