¿Eres la amante?.

Se conocieron en la fiesta de fin de año de la empresa en donde trabajan.

Ella de profesión economista pertenecía al departamento de planeación financiera.

Él era abogado y le encantaba trabajar en el área legal.

En los años que llevaban trabajando ahí, él más que ella, nunca habían coincidido, hasta aquella reunión.

Ese 14 de diciembre en la mágica Hacienda “Los Morales”, en la ciudad de México, les tocó compartir y sentarse uno al lado del otro.

Todo empezó con una plática muy casual:

- “Hola, mi nombre es Mateo”, -le dijo-.

- “Hola Mateo yo me llamo Marcela”, –saludo ella-.

Inmediatamente se sintieron identificados. Ella percibió una gran simpatía por él. En el tiempo que estuvieron conviviendo le pareció un hombre muy ingenioso y encantador. Parecía que estaba destinado para ella.

“Amor a primera vista”, -pensó Marcela-.

La noche parecía no acabar y ellos disfrutaban cada momento entre risas, platica y mucho baile.

Marcela recuerda que sabía muy poco de él, o casi nada, más bien. Sin embargo, ese encuentro los hizo empaparse de adoración mutua.

Estuvieron saliendo juntos a divertirse. Al principio tenían una relación muy cordial…