¿Porqué es importante decir te amo, te extraño y adiós?

Su papá tomó un avión a Nueva York la mañana del 11 de septiembre de 2001.

Marina estaba en clase, cuando el director, quién nunca los visitaba entró de golpe al salón.

Con la cara descompuesta, le explicó al grupo que dos aviones se habían estrellado contra las grandes torres de la ciudad de Nueva York. Marina abrió sus ojos lo más que pudo y se llevó ambas manos a la boca. Al ver su reacción, el director intentó calmarla: “Marina, no te preocupes. Eso sucedió muy lejos de aquí”.

“Mi papá tomó un avión esta mañana”, respondió ella.

“Estoy seguro de que está bien. ¿A dónde iba?”, preguntó el director.

“A Nueva York.”, dijo ella.

“Esto sucedió en la mañana, ¿A qué hora fue su vuelo?”, quiso saber el director.

“A las 7”, contentó Marina.

Él se quedó mudo por unos segundos al igual que todo el salón. “No te preocupes, si sucediera algo, yo regresaría personalmente a avisarles”, dijo el director y salió corriendo sin decir una sola palabra.

Tres minutos después, entró bruscamente. Todos quedaron congelados, en shock, nadie se movía, ni respiraba.

El corazón de Marina se hundió dentro de su pecho cuando vio que el director…